26 jul 2007

Recortes de prensa

FOTO: Carlos Márquez.
ALFREDO MERINO

28/05/2007.- Voy a contaros una historia apasionante. Tanto por sus sorprendentes avatares, como por su final feliz. Hoy voy a hablaros del rugby femenino. Lo siento, pero con todo mi pesar, comienzo por desvelaros ese final venturoso, pues es lo mejor de la historia. Pero también lo menos conocido. Y esto sí que es lo peor de todo.

Hace unos días la selección española femenina de rugby se ha colgado la medalla de bronce en los Campeonatos de Europa celebrados en Madrid. Para ello se impuso a potencias como Gales, Rusia, Escocia, Italia y Holanda. Sólo pudieron con nuestras chicas las inglesas, que les cerraron el camino a la final. A pesar de tan meritorio concurso, ha pasado desapercibido para la opinión pública entre la marea de noticias deportivas, mayoritariamente de fútbol, que hemos tenido estos días.


La noticia gana enteros si se las compara con los chicos. No quiero meterme con ellos, que conste que el rugby es uno de mis deportes favoritos y tengo entre mis amigos a jugadores de este deporte de villanos jugado por caballeros. Ellos, digo, juegan en Segunda División continental y van justitos.

Un ejemplo: el pasado marzo estuve en Nueva Zelanda y tuve ocasión de charlar con algunos 'all blaks', ya sabéis, los jugadores de la selección kiwi. Pues bien, ni uno sabía una palabra de nuestro país en el deporte del balón oval. "No existe", me dijeron al preguntarles sobre nuestra selección de rugby.

La historia del rugby femenino español es apasionante. Comenzaron a practicarlo allá por 1913 en algunos colegios mayores catalanes de una manera por completo secreta. La siguiente noticia importante no llega hasta los 70, cuando un grupo de chicas estudiantes de Educación Física, entrenadas por José Antonio Sancha, que empiezan a competir con los chicos. Se formaron equipos que jugaban entre ellos, pero la Federación Catalana de Rugby no reconoció la actividad hasta 1983.

En 1995 salto la noticia, pues se convirtieron en inesperadas ganadoras del Primer Campeonato de Europa venciendo a Francia en la final por 21-6. Al año siguiente se repitió la final, aunque en aquella ocasión perdieron. En la Copa del Mundo de 2002, celebrada en Barcelona, nuestras chicas terminaron en una honrosa 8ª posición.

Existen unos 200 clubes repartidos por la geografía española, aunque no existe una liga Nacional y deba jugarse a nivel Territorial. Para mayor información, Federación Española de Rugby, y Rugby femenino , completa página con historia, campeonatos, vocabulario, ejercicios y otras cuestiones de este deporte, desde el punto de vista de las féminas.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Debemos trabajar unidas.
tener claro que aunque las cosas a nivel mayor están difíciles y siempre vamos a contar, por el momento, con mínimas ayudas y apoyo, tenemos que trabajar por el rugby femenino.
hay muchas maneras de colaborar: desde promoción (no sólo para sacar chicas para la liga, sino involucrarnos para que las chicas conozcan el rugby desde pequeñas), meternos en federaciones dónde la presencia femenina que trabaje por el femenino sea eficaz, comités, ...
trabajo, trabajo y más trabajo.

ÁNIMO A TODAS ESAS CURRANTAS QUE HAY REPARTIDAS POR ESPAÑA!

Anónimo dijo...

Me encanta leer esas palabras q tantas veces hemos dicho mujeres en la lerta de un hombre.
Yo seguire luchando por el rugby femenino siempre, tenemos q intentar que deje de ser tabú y sea mejor acogido en nuestra sociedad. necesitamos tambien q el rugby masculino nos apoye de verdad, no solo de boquilla. Ya no quiero escuchar mas que "el rugby femenino ni es rubgy, ni es femenino", somos, una por una, un mienbro mas de cada club, de cada federacion. Este deporte nos gusta tanto o mas q a los hombres, creo q nos merecemos todo el apoyo del mundo.
Si trabajamos todas juntas, haremos algo bonito.
Besos
CRISTINA